Estos fáciles copos de avena con plátano y mantequilla de cacahuete son una de mis recetas favoritas para desayunar con antelación cuando sé que voy a tener una semana ajetreada. Todos los ingredientes se mezclan en unos minutos y se mantienen frescos en la nevera durante días. Así que puedo coger un bote para mí o para los niños y disfrutar de un desayuno o merienda saludable antes de salir.

Receta destacada.
He aquí algunas razones por las que me encantan estos Copos de Avena con Mantequilla de Cacahuete y Plátano:
Tiempo de preparación extremadamente corto, sin cocción en absoluto, todos los ingredientes se mezclan en pocos minutos.
Es mejor dejarla toda la noche, perfecta para preparar la comida, y se conserva en la nevera hasta 3 días.
Puedes mezclar y combinar fácilmente diferentes ingredientes para cambiar el sabor, ¡así nunca te aburrirás!
Lleno de hidratos de carbono complejos, grasas saludables, vitaminas, nutrientes y fibra para que te sientas saciado durante horas.
Tan fácil que hasta los niños pueden hacerlo.
Beneficios para la salud
Esta receta de avena de la noche a la mañana no sólo es deliciosa, sino también nutritiva. Los plátanos, por ejemplo, son una excelente fuente de potasio, y la combinación de los hidratos de carbono de la avena y los azúcares naturales de los plátanos la convierten en un excelente potenciador natural de la energía para empezar el tiempo libre de la forma correcta. Acompáñalo con semillas de chía y las grasas omega saludables de la mantequilla de cacahuete pura y tendrás una comida equilibrada de la que los quisquillosos ni se darán cuenta de que es saludable.
Nota: Aunque la avena no contiene gluten por naturaleza, muchos de sus ingredientes contienen gluten. Por lo tanto, si quieres que estos copos de avena con mantequilla de cacahuete no contengan gluten, ¡busca copos de avena certificados sin gluten!

La mayoría de las recetas de avena de la noche a la mañana se hacen con leche, pero a mí me gusta utilizar kéfir en su lugar. El kéfir no sólo tiene un sabor más fuerte, sino que también es rico en una variedad de probióticos que ofrecen muchos beneficios para la salud, como la mejora de la digestión y la gestión de azúcar en la sangre. El kéfir es una bebida fermentada, normalmente comparada con el yogur griego, que tiene un sabor fuerte y ligeramente amargo por sí mismo, pero no te preocupes. El uso de edulcorantes como el sirope de arce en la receta ayuda a aportar dulzor para equilibrarlo.



Cómo guardarla
Una vez montados, tendrás que sellar y refrigerar los copos de avena de la noche a la mañana durante al menos 4 horas o hasta 1 noche. Esto da a la avena tiempo suficiente para absorber el líquido, ablandarse y expandirse. Como resultado, la mezcla de avena se vuelve más fácil de digerir y produce una consistencia cremosa. Es mejor disfrutar de la receta en un plazo de 3 días o puede quedar un poco empapada. Para facilitar la preparación y el almacenamiento, me gusta usar un tarro Mason de 15,2 onzas líquidas. Así, puedo coger uno a la mañana siguiente y disfrutar de una comida ya preparada.
